Teatro y arte loma arriba

Niños y adolescentes de más de 250 escuelas pinareñas , sin discriminar las que están loma arriba, recibieron un alegrón desde inicios del curso: la llegada a su centro de un instructor de arte.
En otras provincias cubanas ha sido igual.
¿Es que todos los niños cubanos se van a convertir en artistas? Seguramente saldrán muchos talentos que están escondidos por ahí, como ya ha ocurrido con la informatización de la sociedad, sí por acá los niños saben más computación que los adultos.
Pero la intención fundamental de este programa no es esa, sino lograr que desde edades tempranas se disfrute del arte, y se aprenda a apreciarlo. Es una de las mejores maneras de lograr que los seres humanos crezcan por dentro.
Pues fui testigo de historias reveladoras de estos jóvenes en sus escuelas.
En el municipio de Guane, a unos 50 kilómetros de la ciudad de Pinar del Río, una de estas muchachas se encontró que los niños le decían que el teatro y los coros eran para niñas.
Eso fue al principio, ya descubrieron que no es así. Ha surgido una transformación en los estereotipos sexistas. Si ello ayuda a cambiar actitudes machistas, muy presentes en los latinos, bienvenido sea.
El joven Marco Antonio Pérez tuvo la sorpresa de ser ubicado en la misma escuelita primaria en la cual estudió, en San Luis, un pueblito con muchas arañitas (carros tirados por caballos) a unos 25 kilómetros de la ciudad capital provincial.
Este muchacho ama el teatro y ya organizó allí su primera gala. Ha descubierto cómo los maestros quieren aprender también actuación y canto y le ayudan a acondicionar un viejo local que estaba lleno de tarecos: aquel será el cuartel general de los teatreros que ha descubierto en la escuela.
¿No es maravilloso esta democracia intelectual que le permita al hijo de un campesino gozar al desdoblarse en la piel de Macbeth? . ¿ Por qué él no iba a tener ese derecho? .